Recambios de competición para coche
|El motor es el corazón del vehículo. Está formado de diferentes piezas que se gastan con el tiempo y que es necesario reemplazar. El mantenimiento de los recambios de competicion no debe ser cosa menor, puesto que se corre el riesgo de estropearlo seriamente.
Sitios especializados
Ciertamente, hoy en día es posible comprar recambios de competicion por un buen precio en sitios especializados. Sin embargo, conviene prestar atención y no fiarse siempre de eventuales copias que no respetan el cuaderno de cargas, los materiales utilizados, o el grosor de la lámina.
Si existe un sector donde los precios continúan subiendo, se trata bien del de los recambios para coche. Frente a esta inflación, muchos intermediarios prometen realizar grandes ahorros. En los centros para reparación de vehículos suele haber una tienda de piezas, donde se pueden adquirir, antes de montarlas en otro taller.
Los filtros
Se aconseja cambiar el filtro del aire y el filtro del habitáculo cada dos años o cada 30.000 km. Las partículas en suspensión en el aire manchan el filtro de aire provocando una pérdida de potencia del motor, una contaminación suplementaria, etcétera. Un filtro del habitáculo nuevo permite disponer de un aire no viciado en el interior del coche.
El filtro de aceite se debe reemplazar cada 15.000 km, porque con el tiempo, el aceite se carga de residuos de combustión, de polvo metálico, y de ahí surge la necesidad de disponer de un buen filtrado.
Los filtros para carburante, gasolina o diesel, se deben cambiar cada 60.000 km para que conserven su eficacia.
Otra pieza mecánica importante, la correa de distribución, dispone de una vida de unos 60.000 kilómetros aproximadamente. Lo mismo ocurre para las bujías de encendido de un motor de gasolina. En cuanto a las bujías de precalentamiento de un motor diesel, la duración media de vida es de 120.000 km, más o menos el mismo número de kilómetros necesarios que hay que recorrer antes de cambiar el embrague.
Duración de vida de las piezas
Pero cuidado, la duración media de una pieza se ofrece puramente a título indicativo. En realidad, cada vehículo, en función de la marca, el modelo, y el motor disponen de un mantenimiento específico. Además, no conviene olvidar de tomar en cuenta el tipo de conducción y el entorno. En efecto, si se pretende lanzarse en la competición de vehículos, conviene saber que las piezas de competición se gastan todavía con mayor rapidez con una conducción deportiva.